A veces tienes muy pocas ganas de cocinar. A veces no quieres poner una olla de agua a hervir, poner un cronómetro y cocinar huevos duros. A veces intentas escalfar un huevo y se te convierte en huevo revuelto en agua. Si te pasa o ha pasado esto deberías plantearte un hervidor de huevos eléctrico. Puede que sea un electrodoméstico que no sea indispensable, pero para quienes tienen menos habilidades en la cocina es muy práctico. ¿Y qué hace? Pues estos aparatos preparan huevos en diferentes cocciones, con poco uso de agua y sin necesidad de que estés atento... ya que avisan cuando se ha terminado el proceso. Así que en El País – Escaparate hemos decidido probar cuatro para elegir el mejor de todos.

¿Cómo usar un hervidor de huevos?

Aunque existen más hervidores de huevos (como los hervidores de huevo de silicona) en este caso estamos probando opciones eléctricas. Primero debemos decir que los cuatro que probamos utilizan un proceso básico similar: mides la cantidad de agua adecuada para la cocción deseada en un vaso medidor (que todos incluyen), la viertes, introduces los huevos, tapas y enciendes... y ¡listo! Es muy simple, aunque hay que acotar que el proceso incluye, y esto puede generar algún percance (y en mi caso lo generó), abrir un agujero en la cáscara del huevo crudo para poder cocinarlo.

Los mejores hervidores de huevos eléctricos

Hervidor de huevos de Russell Hobbs

Por qué lo recomendamos: con este electrodoméstico se pueden cocinar hasta siete huevos al mismo tiempo en tres tipos de cocción: huevos duros, pasados por agua y a baja temperatura. La novedad es que este modelo también incluye tres bandejitas de plástico en las que preparar huevos escalfados de la manera más fácil jamás pensada. El vaso incluido contiene medidas claras para la cantidad de agua que requieren los huevos dependiendo de cuántos se quieren cocinar y el tipo de cocción. Además, tiene una tapa para proteger los dedos de la traicionera aguja afilada de su base, lo que me salvó varias veces de un pinchazo.

El proceso de cocción es igual que en los otros casos. Se incluye el agua, se tapa y se enciende. En este modelo se espera a que se evapore toda el agua (varía dependiendo de qué cocción se quiera) y suena un timbre de aviso. En el caso de los huevos escalfados, solo se debe romper el huevo en la bandeja, con cuidado de no derramar, y seguir los mismos pasos.

Sus puntos débiles: es un modelo un poco más grande, por lo que guardarlo en los muebles de la cocina o limpiarlo es un poco más aparatoso. El tener más opciones de cocción, también implica tener que lavar y almacenar más piezas (lo que en una cocina con muchas cosas puede ser sinónimo de perderlas). Por otro lado, la tapa plástica no cuenta con asas para cogerla cuando terminas de cocinar, por lo que corres el riesgo de quemarte con el vapor.

Hervidor de huevos de Navaris