El mundo del cine deja solo a Kevin Spacey al recoger en Cannes el premio de una fundación

Mucho esmoquin, mucho vestido de gala, pero poco más. De cine, nada. Ni un nombre conocido, ni una estrella que alegre las crónicas. La gala con la que la fundación Better World ha homenajeado este martes en Cannes a Kevin Spacey, en concreto en el hotel Carlton, en mitad de La Croisette, ha tenido más cine en el lado de la prensa en la alfombra roja de la entrada que entre quienes han acudido a la cena. Desde la última vez que el actor pisó el certamen de manera oficial, en 2016, su carrera se ha hundido tras varias acusaciones de agresiones sexuales. Solo los integrantes de Camelot Films, la productora de la película de Spacey The Awakening, que con este acto ha intentado vender el thriller a distribuidores de todo el mundo. Y no el protagonista, Peter Stormare, sino dos secundarios, Alice Eve y Justin Tinto, y el actor, coguionista y productor, además de dueño de Camelot, Matt Hookings.

Spacey apareció en la alfombra, previa a la gala y a la cena, rodeado de los del patronato de la fundación, de su presidente, Manuel Collas de La Roche, y de su secretario general y presidente de la agencia Luxeventgm, dedicada a las relaciones públicas, Gilles Muzas. El ganador de dos premios Oscar por Sospechosos habituales y American Beauty se quedó en el centro, y cambiaron sus acompañantes, por lo que después posó con algunos actores y los productores de The Awakening, que se encuentra en posproducción. El actor ni siquiera se ha acercado a alguna dependencia oficial del festival, reduciendo su presencia a este evento.

Al acabar la alfombra, Spacey ha hablado a las cámaras. En declaraciones a la agencia Efe ha asegurado: “Me encuentro rodeado por muchísimo afecto y amor, nacidos de colegas, amigos y compañeros de reparto de The Awakening. Siento el apoyo y es agradable estar de vuelta”. ¿Es de verdad su retorno? “Me alegría que funcionara”.

Posteriormente, en la cena, aseguró encontrar en su caso bastante paralelismo con la caza de brujas de los años cincuenta en Hollywood, y recordó al guionista Dalton Trumbo, incluido entre los 10 de la lista negra. “Sabemos lo que eso significa, ¿verdad? Que no pudo encontrar trabajo como guionista en Hollywood durante 13 años". Hasta que su nombre apareció en Espartaco, por impulso del protagonista, Kirk Douglas. “Douglas decía que es fácil interpretar al héroe en la pantalla, pero las opciones en la vida real no siempre son tan claras”. A sus 65 años. Spacey cree que “hay momentos en los que uno tiene que defender sus principios. He aprendido mucho de la historia, se repite con mucha frecuencia. La época de la lista negra fue terrible en nuestra industria y debemos aprender de ella para que no vuelva a ocurrir [...]. ”Hoy, nos encontramos de nuevo en la intersección de la incertidumbre y el miedo en la industria cinematográfica". Y acabó parafraseando la canción de Elton John I’m still standing.

El galardón estaba justificado, según Better World Fund, por su “brillantez artística” y su “impacto en el cine y las artes”. Según el presidente de la fundación, Manuel Collas de La Roche, “las extraordinarias contribuciones de Kevin al arte del cine han dejado una huella tanto en el público como en los cineastas”.

Hace dos años, Spacey fue declarado, después de un largo juicio en el Reino Unido, no culpable de delitos sexuales. Ahora encara una demanda civil. Previamente, en 2022 había sido absuelto de agresión sexual en otra demanda civil en Nueva York. Sin embargo, a lo largo de estos años, ha sido acusado por más de 30 hombres de conductas inapropiadas. Entre los 30 hombres que han denunciado su mala conducta está el actor Guy Pearce (The Brutalist). A principios de este año, Pearce explicó a The Hollywood Reporter: “Me atacó, sin duda” en el rodaje de L. A. Confidential. Aseguró que tenía “miedo de Kevin, porque es un hombre bastante agresivo”, antes de confesar que había roto a llorar al enterarse de otras acusaciones contra Spacey en 2017.

Mientras se desarrollaba el proceso judicial, Spacey no ha trabajado mucho, aunque sí ha recibido varios reconocimientos. En 2023 viajó a Turín, donde fue honrado por su trayectoria en un evento organizado por el Museo Nacional del Cine de Italia. El año pasado, recibió otro trofeo en los Folkestone Independent Film Awards en Reino Unido, y en Taormina (Sicilia). En Italia rodó su primera película tras las acusaciones: El hombre que dibujó a Dios (2022), de Franco Nero.