Shai Gilgeous-Alexander destrona a Jokić al coronarse mejor jugador de la NBA

Shai Gilgeous-Alexander, también conocido como SGA, se ha coronado como mejor jugador (MVP) de la NBA de la última temporada regular. El base canadiense de 26 años de los Oklahoma City Thunder ha batido al serbio Nikola Jokić por dos veces en la última semana. Primero, su equipo eliminó en el séptimo partido a los Denver Nuggets para pasar a la final de la Conferencia Oeste. Ahora, SGA ha destronado a Jokić como MVP, según ha informado la NBA.

Lo que ya era seguro es que iba a ser el séptimo título de mejor jugador para un no estadounidense, algo sin precedentes en la NBA. El griego Giannis Antetokounmpo (Milwaukee Bucks) se llevó los títulos de 2019 y 2020; Jokić (Denver Nuggets), conquistó los de 2021, 2022 y 2024, y Joel Embiid (camerunés-francés, aunque luego se nacionalizó estadounidense), el de 2023. Junto al canadiense y el serbio, el tercer finalista de este año era Antetokounmpo.

El líder de los Oklahoma City Thunder, de 1,98 metros de altura, logró un promedio de 32,7 puntos por partido, lo que le convirtió en el mejor anotador de la NBA en la temporada, por delante de Antetokounmpo (30,4) y de Jokić (29,8). También fue el máximo anotador absoluto, con 2.484 puntos, en este caso con más de 400 de ventaja sobre el serbio, que se perdió más del doble de partidos que el canadiense. Gilgeous-Alexander suma 6,4 asistencias y 5,0 rebotes por partido, claramente por debajo del serbio, al que supera, sin embargo, en los capítulos de tapones, robos de balón y pérdidas de balón.

Jokić ganó el título de mejor jugador (MVP) de la NBA en tres de las últimas cuatro temporadas. Muy bien podría haber sido elegido de nuevo este año. Cerró la temporada con un triple doble de media, esto es, más de 10 puntos, rebotes y asistencias por partido, algo que solo habían logrado en la historia de la NBA Russell Westbrook y Oscar Robertson. Además, en las tres categorías está entre los tres primeros de la temporada. Logró un insólito triple doble de 30 puntos, 20 rebotes y 20 asistencias hace unas semanas.

“Si no gana el MVP, es la mejor temporada de todos los tiempos que no gana el MVP”, dijo el entrenador interino de los Nuggets, David Adelman, sobre su jugador. Jokić ha perdido la ocasión de igualar en la clasificación histórica a LeBron James y Wilt Chamberlain, cuatro veces MVP. Por encima de ellos solo están Michael Jordan y Bill Russell, con cinco títulos cada uno, y, en lo más alto, Kareem Abdul-Jabbar, con seis.

Pese a los méritos del serbio, Shai Gilgeous-Alexander se ha impuesto en la votación del para elegir al mejor del año. De los 100 participantes, 71 le eligieron a él en primer lugar y 29 a Jokić. Y ambos jugadores también acapararon los 100 votos para el segundo lugar. Antetokounmpo fue tercero.

A favor de SGA han jugado dos factores principales. El primero, que el jugador canadiense ha convertido a los Thunder en el mejor equipo de la temporada. El segundo, la novedad. A eso se suma un juego más explosivo y vistoso que el de Jokić, cuya eficacia a veces no va de la mano del espectáculo.

El mérito de SGA como director del juego del equipo de Oklahoma City es indiscutible. Sin grandes estrellas a su alrededor, con dos jóvenes como Jalen Williams y Chet Holmgren como principales escuderos, los Thunder han cerrado la liga con 68 victorias y 14 derrotas, con una ventaja de 16 victorias sobre los segundos de la dura Conferencia Oeste. Los partidos contra equipos del Este se saldaron con una sola derrota. Además, los Thunder han logrado en los 82 partidos de la liga un diferencial medio de 12,9 puntos a su favor, el mayor en la historia de la NBA, superando un récord que databa de comienzos de la década de 1970.

En los playoffs está siendo también la figura decisiva. Su equipo barrió a los Grizzlies en primera ronda y se impuso a los Denver Nuggets en el séptimo y decisivo partido de la serie. Este martes, en el primer partido de la final de la Conferencia Oeste, contra los Minnesota Timberwolves, logró 31 puntos en la victoria de su equipo. “Es un jugador especial”, dijo Jokic sobre Gilgeous-Alexander cuando los Thunder eliminaron a los Nuggets. “Su selección de tiros, su capacidad de tiro... Siempre está ahí. Es un jugador especial”, añadió.

En su discurso de aceptación del premio, SGA dio las gracias a sus compañeros de equipo. “No puedo expresar con palabras lo mucho que significáis para mí, y no solo como jugador de baloncesto, sino como familia. Sé que lo sabéis, hacemos todo juntos, dentro y fuera de la cancha, vamos de compras... Sois como hermanos para mí y, sin vosotros, sé que nada de esto sería posible. Quiero que sepáis que este premio también es vuestro. Así que muchas gracias a todos”, dijo. El agradecimiento no fue solo de palabra. El base de los Thunder regaló después un reloj Rolex a cada miembro del equipo.

SGA fue elegido en el puesto número 11 del draft de 2018 por los Charlotte Hornets y traspasado inmediatamente a Los Angeles Clippers en un año en que los ojeadores de la NBA no estuvieron muy atinados. El canadiense fue seleccionado por detrás de ocho jugadores que nunca han jugado un All Star. Tras debutar en los Clippers en la temporada 2018-2019, este es el sexto curso del base de Hamilton (Ontario) con los Oklahoma City Thunder, a donde llegó en una operación en la que fue una parte del precio pagado por los Clippers para hacerse con Paul George.

El equipo de Oklahoma salió ganando. Desde su primera temporada. Gilgeous-Alexander se convirtió en el máximo anotador de los Thunder, que le amarraron en 2021 con un contrato de cinco años por 172 millones de dólares. En las tres últimas ligas ha promediado más de 30 puntos por partido, pero es en esta en la que ha logrado sus mejores números, incluyendo varios partidos de 50 o más puntos. Es el tercer jugador en la historia del equipo que gana el premio de MVP, tras Kevin Durant (2014) y Russell Westbrook (2017), y el segundo canadiense tras Steve Nash, que lo obtuvo dos veces. Es decidido en la cancha y retraído fuera de ella. Está casado y tiene un hijo.

Para completar una temporada redonda, a SGA le falta en realidad lo más importante: lograr el anillo del campeón. Tras la eliminación de los Celtics de Boston y los Cleveland Cavaliers, su equipo se ha convertido en el claro favorito de las apuestas. Tiene que superar a los Timberwolves para cruzarse en la final con el ganador de la eliminatoria entre los Knicks y los Pacers. Si Oklahoma City llega a alcanzar el título, pocos dudan de que podrá añadir otro MVP a su palmarés, el de mejor jugador de las finales. Falta aproximadamente un mes para saber si es así.